Esos robles entre la niebla parecen sumar en su conjunto muchísimos otoños. Esa forma de candelabro de sus troncos y de sus ramas parecen obedecer a antiguas relaciones entre los árboles y los pobladores de esas tierras, ya caídas en desuso y con frecuencia olvidadas. Tus fotos los sacan de las brumas con exquisita elegancia.
Que maravilha só falta sentir o perfume da natureza.
ResponderEliminarUm abraço e continuação de boa semana.
Andarilhar
me gusta el camino gitano...
ResponderEliminarExtraordinárias imágenes. Da gusto perderse unas horas y disfrutar de la calma.
ResponderEliminarUn fuerte abrazo Luis
Tienen algo mágico esos árboles. Preciosas fotos
ResponderEliminarsaludos
Y sigue la niebla, verdad? Los árboles parecen fantasmas. Preciosas, Luis.
ResponderEliminarEsos robles entre la niebla parecen sumar en su conjunto muchísimos otoños. Esa forma de candelabro de sus troncos y de sus ramas parecen obedecer a antiguas relaciones entre los árboles y los pobladores de esas tierras, ya caídas en desuso y con frecuencia olvidadas. Tus fotos los sacan de las brumas con exquisita elegancia.
ResponderEliminar